En ocasiones, tengo problemas para encontrar información en páginas o textos de contenido en español que informe sobre adecuados programas de higiene oral en el paciente con disfagia. He decidido, por tanto, hacer un breve post con información de la que dispongo e informaros de aspectos que tengo en cuenta a la hora de proceder. Es una pena que haya guías y guías de disfagia que pasen pro alto este tema. Muchos de nuestros pacientes acaban haciendo neumonías por aspiraciones que no controlamos y se debería reservar en todos los libros o compendios de disfagia al menos un capítulo que trate este tema (no digo que no existan). Al final os añado la bibliografía de donde he sacado yo esta información. A mi siempre me ha resultado efectivo y me ha ayudado a abrir más el abánico de alimentos que han podido tomar mis pacientes.
Lo primero. Si aún no nos hemos cepillado la boca por la mañana es muy probable que 10 billones de microorganismos campen en ella a su gusto. Si esos microorganismos viajasen a través de nuestra saliva al pulmón ante alguna dificultad en el manejo de la misma, problemas sensoriales o en nuestra capacidad para expulsarla por medio de la tos seriamos susceptibles de padecer enfermedades respiratorias graves, como puede ser una neumonía.
En nuestra sociedad existe una enorme conciencia de higiene corporal pero la boca es una parte del cuerpo que tiende a descuidarse, sobre todo si nos referimos a personas que necesitan algún tipo de ayuda a la hora de participar en sus actividades básicas de la vida diaria.
Un abordaje eficaz y eficiente de la disfagia en cualquier centro sanitario o lugar donde viva una persona que padezca disfagia debe pasar por la instauración de controles y protocolos de higiene oral para evitar las consecuencias de las aspiraciones silentes, tan frecuentes en personas que padecen disfagia. Tradicionalmente, se ha dado mucha importancia a la modificación de texturas del alimentos, uso de maniobras deglutorias e implementación de programas de reeducación de la deglución con notables resultados pero ese trabajo no queda completo si no se hace incapié en la problemática que deriva de una mala higiene oral.
Un estudio de placa dental de Fourrier, reveló que “ la placa dental debe considerarse un depósito específico de colonización y de consiguiente infección intrahospitalaria en pacientes de UCI”.
Un estudio realizo en Japón reveló que el cepillado dental y la higiene oral reduciría notablemente el riesgo de neumonía en UCI en pacientes con ventilación mecánica (una disminución del 62,5%)
Campbell asegura que si no se empiezan unos adecuados cuidados de higiene oral antes de las primeras 48 horas del ingreso en el hospital, la boca se coloniza de bacterias perjudiciales. Este mismo autor afirmaba que el cepillado era la mejor forma de combatir este problema pero no especifica la forma en la que debe hacerse la higiene oral.
En un estudio realizado en un hospital estadounidense de 350 camas se redujo la neumonía gracias a un protocolo de higiene oral reduciendo los costes a 1,18 millones de euros. El estudio japonés de dos años de duración en 11 residencias de ancianos el riesgo de padecer neumonía disminuyó enormemente en las personas a las que se les aplicaron cuidados de higiene oral. Creo que los datos lo dejan bastante claro.
La clorhexidina se presenta como un adecuado agente para combatir la placa que se forma en la cavidad oral. Hay que tener en cuenta que el Ph de una saliva sana ronda en torno a 6. Cualquier elemento que modifique ese Ph hará que esa saliva, si es aspirada a pulmón, sea potencialmente peligrosa. Por poner un ejemplo de elementos que no servirían para este fin y que serían totalmente contraproducentes, nos encontramos con las torundas con cítricos, tan comúnmente usadas, que haría que el Ph de la saliva fuera más ácidos y favorecerían los problemas respiratoros. Existen en el mercado productos más adecuados para este fín.
Ransier, A., Epstein, JB Lunn, R., y Spinelli, J. (Nursing Cáncer, 1995) encontraron que un cepillo de espuma de clorhexidina empapado podría reducir la placa y la gingivitis tan eficazmente como un cepillo de dientes. Sin embargo, el estudio fue realizado en individuos sanos solamente en un ensayo de 2 semanas. Falta investigar más, lo cual no significa que este tipo de abordajes no sea eficiente.
La investigación sobre Clorhexidina Gluconato-(CHG) ha sido sólo adecuada en la disminución del riesgo neumonía por aspiración (por Shay) Los aspectos positivos de clorhexidina son: antibacteriano de amplio espectro y continúa su acción en la boca durante 12 horas. Por tanto, vemos que no solo es importante la creación de un programa de higiene oral sino que los material y formas de proceder deben tener una lógica para obtener la mayor eficacia posible.
Tendremos en cuenta la postura del paciente al realizarlo, proceder después de cada comida o antes de ingerir líquidos, llevar un registro exhaustivo y controlarlo y vigilar signos y síntomas relacionados con problemas respiratorios para comprobar efectividad del programa. Todo el personal debe estar informado sobre los efectos de una mala higiene oral en el paciente con disfagia.
Existen protocolos o los podemos diseñar para valorar la higiene oral de las persona. Si no también los podemos elaborar nosotros mismos.
Cason, et al, 2007 hablan de un 56% de personas hospitalizadas a las que se les puede meter en estos protocolos y al parecer se quedaron cortos. Fijaos que no es trabajo baladí.
Dependerá de la marca de Clorhexidina que utilicemos para pautar la proporcion de la misma en la solución de limpiado (cuiudado porque algunas soluciones pueden llevar un % de alcohol y ello puede irritar la mucosa). Podemos llevar a cabo la limpieza oral mediante la maniobra de descenso de cabeza para proteger vía aérea durante la misma. Hay que dar tiempo al manejo de la saliva. En caso de hipersensibilidad a la Clorhexidina se puede usar CPC. También tenemos la opción del bicarbonato de sodio que se presenta como un agente potente contra la mucositis oral y el dolor.
Si alguien tiene dudas en este aspecto quedo a vuestra disposición para aquello que necesiteis.
Bibliografía:
http://www.swallowstudy.com/?page_id=320 Oral Care and Aspiration Pneumonia Prevention
http://www.swallowstudy.com/?p=445 How To Perform Effective Oral Care
http://www.sageproductsglobal.com/es_es/pdf/80076.pdf SAGE Products